Desde Bélgica una de las siete cervezas de abadía con denominación Trapense del mundo, en este caso, la variedad Blond Ale producida de manera artesanal en la abadía de Sint Benedictus De Achelse Kluis. La Abadía se situa en tierras flamencas, Bélgica. Fué fundada en 1686 y parcialmente destruida en la Revolución Francesa y la Segunda Guerra Mundial. Después de varios años retomó la producción de cervezas en 1998.Color dorado de moderada turbidez presenta una cremosa corona de espuma blancuzca duradera hasta el último trago. En aromas sobresalen lúpulos, frutada, olivo, levadura, floral, suave dulce de cebada bien fresca y suave. En boca presenta cuerpo de buena textura, sedosa, gasificación media, algo de sedimento pero en pequeña cantidad. Paladar frutado de buen carácter amargo, hierbas, notas alicoradas por sus 8% de graduación alcohólica, maltosa, pequeños cítricos, bien balanceada. Final seco floral de intenso y corto amargor. Una Blond Ale de muy buena calidad.